Es un secreto a voces que nos encantan las sesiones presenciales, como también los es que estamos deseando recuperar los abrazos, más allá del toque simbólico de nuestros codos. Pero lo cierto es que la situación actual nos está permitiendo acelerar el desarrollo de metodologías que hagan posible combinar lo mejor de las sesiones presenciales con lo mejor de las sesiones online. Así como, en nuestro día a día, las personas estamos mezclando, de forma natural e intuitiva, elementos propios de nuestros entornos físicos con herramientas tecnológicas sin diferenciar conscientemente entre dichos “mundos”, ¿por qué no hacerlo también en la formación y en las sesiones de trabajo? La verdad es que estamos contentos con los resultados y vamos a seguir explorando nuevas maneras de mejorarlos.
Esta semana hemos podido experimentar cómo aplicar herramientas online en nuestras sesiones presenciales y cómo generar ambientes pseudo-presenciales en entornos online, tanto en los talleres-jornadas de difusión de La Economía Social de Fedecotran, desarrollados el lunes y el martes para algunos socios y socias de Givit, como en el curso sobre metodología de formación para entornos digitales de La Escuela de Economia Social. El reto es que lleguemos a olvidarnos de la dicotomía y este objetivo va a seguir impulsando nuestro trabajo también con relación a las dinámicas participativas. Lo que a principios de marzo nos parecía tan complicado, empieza a ser ya algo mucho más factible.
Aunque hay cosas que la tecnología NUNCA va a poder sustituir, estamos viviendo en primera persona la paradoja de que para seguir desarrollando empresas más humanistas y más humanas, se hace imprescindible desarrollar también empresas más tecnológicas y mejorar nuestras habilidades en esta materia.
¿Y vuestras empresas, son empresas onoff?