Esta cita nos recuerda la vital importancia que cobra hoy en día el tener personas en el equipo que sean capaces de ver oportunidades allí donde todo el mundo se lamenta de las amenazas. Porque no podemos olvidar cómo es el entorno en el que intentamos sacar adelante nuestras empresas, nuestros negocios y nuestras vidas… Y que Emprender (o Intraemprender) no consiste en dar de alta una sociedad, tampoco consiste en tener una “emprendedora idea feliz”, ni siquiera es un “modo de trabajo”.
Emprender es una actitud vital y profesional, una forma de enfrentarse al mundo, que requiere de cierto gusto por la incertidumbre, cierto sentido del placer ante la inseguridad. Es un medio, pero también un fin en si mismo. Porque las personas emprendedoras disfrutan realmente emprendiendo.
Pero si no te sientes del todo identificado con estos rasgos, no desesperes…existen otras formas de afrontar el emprendimiento que también pueden tornarse en garantías de éxito empresarial, se trata, a nuestro juicio, de la capacidad de “no darse por vencido”, de enfrentarse a las adversidades con espíritu luchador, con tenacidad, constancia y positividad. En definitiva, aprenderás a hacer de la incertidumbre tu forma de vida, lo convertirás en un hábito saludable que te reforzará y te hará evolucionar, puesto que nuestra vida es un proceso con una sola certidumbre.
Al fin y al cabo, ya decía Jorge Wagensberg que la felicidad requiere que el futuro sea incierto.
¿Acaso esta intrínseca incertidumbre que nos rodea no es una buena oportunidad para ser felices?
Jorge Wagensberg Lubinski (Barcelona 1948-2018) profesor, investigador y escritor español. Licenciado y doctorado en Física. Premio extraordinario por la Universidad de Barcelona, donde fue profesor de Teoría de los Procesos Irreversibles en la Facultad de Física También fue profesor invitado en la Danube University Krems (Austria).